Antonio Brufau, presidente de Repsol, ha subrayado la importancia de integrar energéticamente a España y Portugal en la Unión Europea y reforzar las conexiones energéticas con Europa y África. En su intervención durante la conferencia «Inspira Portugal, 50 años después», Brufau afirmó que mientras para la Península Ibérica esta integración representa una oportunidad, para el resto de la UE es una necesidad.
Integración energética en Europa como una prioridad
Brufau enfatizó la necesidad de una Europa más competitiva y energéticamente integrada. Durante su participación en un panel junto al director ejecutivo de EDP, Miguel Stilwell, y la presidenta del Operador del Mercado Eléctrico, Carmen Becerril, señaló que el sistema energético europeo está fragmentado, lo que afecta la capacidad de crecimiento y desarrollo de la región.
“La invasión de Rusia a Ucrania ha revelado las debilidades del sistema energético europeo. España y Portugal, aunque eficientes en sus propios sistemas, necesitan una mejor conexión con Europa para aprovechar oportunidades estratégicas”, afirmó Brufau.
Necesidad de replantear el sistema de interconexiones energéticas
El presidente de Repsol abogó por repensar las conexiones energéticas entre la Península Ibérica y el resto de Europa. Destacó que aunque los costes actuales no son un problema tan dramático para la región, la falta de conexiones limita las oportunidades de crecimiento. España y Portugal podrían convertirse en un puente entre Europa y el norte de África, aprovechando la generación de energías renovables y combustibles fósiles de la región.
«Debemos romper la barrera de aislamiento y establecer una mayor conexión con Europa, lo que no solo beneficiará a la península, sino también a toda la Unión Europea», concluyó Brufau.
Competitividad energética en la península Ibérica
Por su parte, Miguel Stilwell, director ejecutivo de EDP, destacó la competitividad del precio de la electricidad en la Península Ibérica, que es incluso más bajo que en Estados Unidos. Stilwell resaltó que es crucial aligerar los trámites burocráticos en España y Portugal para aumentar la competitividad energética y facilitar el acceso a energías limpias y asequibles.
«En ciertos momentos, la energía en la península es incluso gratuita, lo que representa una gran oportunidad para la industrialización de la región», afirmó Stilwell.
Hacia una energía limpia y barata
Stilwell hizo hincapié en los objetivos actuales de la industria energética, que se centran en ofrecer energía barata, limpia y disponible. Celebró el avance de la Península Ibérica en el sector energético, que cada vez más aprovecha períodos de electricidad a costo cero, lo que permite potenciar el desarrollo industrial.
Con un enfoque claro en la sostenibilidad energética y la competitividad, la Península Ibérica está posicionada como una región clave en la estrategia energética de Europa, reforzando el papel de España y Portugal como actores importantes en la transición hacia un sistema energético más integrado y eficiente.
