El Grupo Español para el Crecimiento Verde (GECV), con el apoyo del think tank europeo independiente E3G, ha lanzado hoy un manifiesto dirigido a los gobiernos de España y Portugal. Este documento surge a vísperas de la Cumbre Ibérica de Faro, en la que se busca intensificar la cooperación entre ambos países para alcanzar la neutralidad climática en el sistema eléctrico peninsular lo antes posible.
El manifiesto, titulado «Hacia un sistema eléctrico hispano-portugués con cero emisiones netas: una oportunidad única para reindustrializar la Península Ibérica», plantea objetivos ambiciosos, instando a que la Península se convierta en un referente para la industria verde europea. Se propone que España y Portugal establezcan una meta común para electrificar sus sistemas eléctricos y alcanzar las cero emisiones netas mucho antes de 2035.
El impacto industrial y económico de la electrificación
El documento destaca que España y Portugal están ante una oportunidad histórica. Según un estudio reciente de McKinsey, una transición decidida hacia la electrificación podría aumentar las exportaciones industriales en un 25%, generar hasta 1,5 millones de nuevos empleos y contribuir hasta un 20% del PIB peninsular.
El manifiesto subraya que esta transformación no solo es un reto ambiental, sino también económico e industrial. La electrificación de sectores clave, especialmente la industria, permitirá una descarbonización más rápida y eficaz, posicionando a la Península Ibérica como un «hub» de referencia en Europa.
Cooperación estratégica para la descarbonización
Una de las claves del éxito, según el manifiesto, radica en la colaboración estrecha entre ambos países. Esta cooperación permitiría la planificación conjunta de infraestructuras energéticas y soluciones de almacenamiento de energía, acelerando la transición hacia un sistema eléctrico basado en energías renovables.
Asimismo, se destaca la importancia de desarrollar señales regulatorias claras que impulsen tanto el despliegue de energías renovables como la electrificación de diferentes sectores. España y Portugal, al trabajar juntos, estarían mejor posicionados para garantizar un Pacto Industrial Limpio de la UE ambicioso, que favorezca el desarrollo de cadenas de valor limpias y sostenibles.
El liderazgo de la Península Ibérica en la transición energética
El Grupo Español para el Crecimiento Verde concluye que la Península Ibérica tiene el potencial de liderar la transformación hacia una economía verde en Europa. La descarbonización de los sistemas eléctricos antes de 2035 no solo es factible, sino también imprescindible para mantener el tejido industrial competitivo y atraer nuevas inversiones que generen empleo y sostenibilidad.
El manifiesto es claro: es el momento de ser audaces y de trabajar conjuntamente para convertir a la Península Ibérica en el motor verde de Europa.