El gobierno alemán adoptó ayer su estrategia nacional de hidrógeno (10 de junio), con planes de aumentar la capacidad de producción a 5 GW para 2030 y 10 GW para 2040. Para lograr esto, se invertirán 7 mil millones de euros en nuevos negocios e investigación, según informó EURACTIV.
Cuando presentó ayer la estrategia de hidrógeno de Alemania en Berlín (10 de junio), el ministro de economía Peter Altmaier (CDU) calificó el documento de 28 páginas como «la mayor innovación desde el EEG», una referencia a la histórica ley alemana de fuentes de energía renovable que entró en vigor en 2000.
Con este «salto cuántico», Alemania quiere convertirse en el líder mundial en tecnologías de hidrógeno, agregó Altmaier, quien habló junto a otros tres ministros.
Esta es la primera vez que Alemania se ha fijado objetivos cuantitativos para la producción de hidrógeno.
Para 2030, Alemania apunta a tener generadores con una capacidad total de hasta 5 GW, lo que corresponde a la generación de hidrógeno de aproximadamente 14TWh. Para 2040, la capacidad debería incrementarse a 10 GW.
Alimentado por el viento en alta mar
La mayor parte de la energía requerida será provista por parques eólicos marinos, mientras que los 14 TWh requerirían alrededor de 20 TWh de electricidad verde.
Los socialdemócratas (SPD) habían exigido el doble de esa cantidad. Sin embargo, cuando el gobierno federal presentó su paquete de estímulo económico la semana pasada, el gabinete rápidamente llegó a un acuerdo.
De los € 130 mil millones prometidos en el paquete de estímulo económico, ahora se gastarán € 7 mil millones para crear un mercado impulsado por la demanda de hidrógeno producido a costos competitivos.
Hasta ahora, la producción de hidrógeno a partir de energías renovables solo ha sido posible en pequeñas cantidades en los llamados «laboratorios reales» que determinan cómo se puede ampliar la electrólisis.
Además, el gobierno alemán está proporcionando 2.000 millones de euros para asociaciones internacionales, por ejemplo con el norte de África, donde ya ha concluido varios acuerdos para participar en las instalaciones de producción allí.
Y un consejo nacional de hidrógeno de 25 miembros compuesto por representantes de la industria, la ciencia y la sociedad civil brindará asesoramiento regular al gobierno.
La estrategia de hidrógeno va acompañada de un plan de acción que contiene 38 medidas. Incluyen la creación de mejores condiciones para las energías renovables y condiciones más atractivas para la construcción de parques eólicos marinos.
“Quien diga sí al hidrógeno también debe decir sí a la energía eólica. Es por eso que debemos expandir y expandiremos constantemente las energías renovables ”, subrayó ayer (10 de junio) la ministra de Medio Ambiente, Svenja Schulze (SPD).
Cuotas de demanda en aviación
El hidrógeno se usará primero donde los procesos no puedan electrificarse, por ejemplo, en el transporte de mercancías pesadas, la producción de acero, la industria química y la aviación.
Las empresas de estos sectores recibirán ayuda financiera si invierten en plantas de electrólisis para transformar sus procesos de producción. Con este fin, se lanzará un programa piloto para los denominados contratos de carbono para la diferencia (CfD), dirigido a las industrias siderúrgica y química.
El hidrógeno también se utilizará en el sector del transporte, una idea que fue originalmente rechazada por el ministerio de medio ambiente. Y para apoyar la producción de energías renovables, se establecerá infraestructura para el reabastecimiento de hidrógeno, entre otras cosas.
Además, el gobierno alemán quiere examinar si se puede implementar una cuota del 20% para las energías renovables en la aviación para 2030.
Para Oliver Krischer, vicepresidente del Partido Verde, este punto es esencial: «Se deben construir grandes capacidades de producción sin tener claro quién comprará este hidrógeno en primer lugar». Se necesitan cuotas de mezcla obligatorias, por ejemplo, en el tráfico aéreo o en la red de gas natural.
Sin embargo, según él, el hidrógeno está fuera de lugar en el sector del automóvil.
«El dinero planeado para las estaciones de servicio de hidrógeno es dinero desperdiciado, porque los autos eléctricos son mucho más baratos y su eficiencia no se puede igualar», dijo.
Subvenciones solo para hidrógeno verde
El debate sobre cuánto hidrógeno «verde» producido a partir de energías renovables debería promoverse en Alemania fue particularmente controvertido. El 99% del hidrógeno hoy proviene de combustibles fósiles y la industria del petróleo y el gas argumenta que el tipo «gris» producido a partir del gas natural también debe desempeñar un papel, al menos en las etapas iniciales, para aumentar la producción.
Al final, se encontró una solución de compromiso: aunque el gobierno alemán promueve fuertemente el hidrógeno verde, no excluye el tipo «gris».
«Por supuesto, experimentaremos pasos de transición cuando reemplacemos el gris con hidrógeno verde», dijo Altmaier.
La estrategia también anticipa que se desarrollará un mercado de hidrógeno en toda Europa en los próximos diez años, donde también se comercializará hidrógeno «azul» y «turquesa». Tanto el hidrógeno «azul» como el «turquesa» se producen a partir del gas natural. Pero mientras que el hidrógeno «azul» usa la captura y el almacenamiento de carbono para enterrar las emisiones de CO2 bajo tierra, el «turquesa» usa la pirólisis para separar el hidrógeno del gas natural, dejando el carbono sólido como un subproducto en lugar de CO2.
Dado que Alemania está integrada en las redes de energía de la UE, «el hidrógeno neutral en CO2 también jugará un papel en Alemania y, si está disponible, también se utilizará de forma provisional».
Fuerte enfoque en el hidrógeno verde.
Alemania ha declarado la creación de una infraestructura europea de hidrógeno como una de las principales prioridades de su próxima Presidencia del Consejo de la UE, con la esperanza de establecerse como un campeón de exportación en los próximos años.
«Las tecnologías verdes de hidrógeno pronto deberían llevar el sello ‘Hecho en Alemania'», dijo la Ministra de Investigación Anja Karliczek (CDU).
Los representantes de la comunidad empresarial y la sociedad civil han acogido con satisfacción la estrategia y elogiaron el fuerte enfoque en el hidrógeno verde.
Al mismo tiempo, las largas negociaciones dentro del gobierno pusieron de relieve las dificultades en la transición del hidrógeno a base de fósiles.
«La estrategia alemana de hidrógeno muestra que uno de los mayores consumidores de gas fósil del mundo se está preparando para un futuro sin él», escribió Felix Heilmann, investigador del grupo de expertos sobre el clima E3G, quien agregó que la electrificación y la eficiencia energética deben avanzar simultáneamente.
