Los edificios representan el 40 % de la demanda total de energía de la Unión Europea (UE), pero el consumo podría reducirse en hasta un 20 % si las personas adoptasen un estilo de vida más eficiente en materia de energía. Un proyecto de la UE está desarrollando soluciones TIC para alentar este tipo de comportamiento.
Las tecnologías de contadores inteligentes y los sistemas domóticos han demostrado ser eficaces para cambiar el comportamiento de los usuarios finales. Con esto en mente, el proyecto financiado con fondos europeos InBetween ha desarrollado soluciones inteligentes para edificios, formadas por una plataforma en la nube y una aplicación para móviles. «Estamos yendo más allá de las tecnologías TIC existentes para alentar un cambio de comportamiento hacia formas de vida más eficientes en materia de energía», subraya el coordinador del proyecto, Donato Zangani. «Para ello, estamos ayudando a los usuarios a identificar el desperdicio de energía y a aprender a conservarla, además de motivarles para que actúen». La plataforma, que está disponible como aplicación web y para móviles, permite a los usuarios adaptar los servicios a sus propias necesidades y preferencias sin que esto afecte al confort».
Servicios energéticos avanzados
«Toda una gama de servicios, como la programación, notificaciones oportunas y valores de referencia, proporcionan la combinación adecuada de motivaciones medioambientales y socioeconómicas para ahorrar energía», señala Zangani. «Los activadores y las notificaciones ayudan a ahorrar energía de forma sencilla y, en ocasiones, ininterrumpida». Más específicamente, estos servicios tienen en cuenta sobre todo tres valores analíticos de la energía (consumo actual, ocupación y condiciones meteorológicas) y utilizan la competición como forma de promover un comportamiento eficiente en materia de energía. La plataforma supervisa el consumo energético de los usuarios y determina el momento ideal para activar un electrodoméstico con el fin de reducir al mínimo los costes y optimizar cualquier posible presencia de fuentes de energía renovable como paneles solares y turbinas eólicas. «La combinación de datos de consumo similares de determinados edificios durante un período específico hace que resulte más sencillo comparar visualmente períodos temporales y extraer conclusiones, así como identificar patrones de consumo sospechosos», explica Zangani. Al conectar contadores inteligentes a todos los dispositivos, la plataforma ofrece información a los residentes en el hogar sobre cómo gastan su energía y qué electrodomésticos se están usando. Un servicio de supervisión continua analiza prácticamente en tiempo real datos relativos a la conservación de la energía, la seguridad y cuestiones relacionadas con la salud. Asimismo, se envían notificaciones para motivar a los usuarios finales a que adopten unos hábitos más sanos, seguros y eficientes energéticamente.
Una elevada aceptación de la plataforma por parte de los usuarios
El equipo de InBetween llevó a cabo un análisis intermedio para comprender el alcance del cambio en el consumo energético tras la puesta en marcha de la plataforma. Aproximadamente el 38 % de los edificios donde se descargó la aplicación presentaron una reducción significativa del uso de la energía frente al 33 % del año anterior. Un análisis de más de 2 000 eventos de notificación y de activación enviados durante los primeros meses de 2020 muestra una excelente tasa de respuesta por parte de los usuarios finales. Las entrevistas y las impresiones recibidas de los usuarios también señalan un alto nivel de satisfacción con el uso. Se ha puesto en marcha un concurso fotográfico en el que se pregunta a los usuarios sobre hábitos inteligentes que ayudan a ahorrar energía y dinero en el hogar. Dicho concurso, que estará abierto hasta el 15 de septiembre, también servirá para aumentar la concienciación sobre los diversos servicios de la plataforma.
Fuente | Comisión Europea
