Galicia, históricamente líder en capacidad eólica instalada, enfrenta un momento crítico en su camino hacia la transición energética. A pesar de contar con un notable potencial y con 137 proyectos autorizados que suman 3.000 MW adicionales de energía eólica, más del 86% de esa potencia, equivalente a 2.600 MW, permanece bloqueada debido a restricciones legales y suspensiones cautelares.
El estancamiento de la energía eólica como desafío para la competitividad gallega
Según Paula Uría, directora general de Energías Renovables y Cambio Climático de la Xunta de Galicia, “este bloqueo no solo ralentiza el avance hacia la descarbonización, sino que también impide que Galicia recupere su posición como líder en el sector renovable”. Actualmente, Galicia ocupa el cuarto lugar en potencia instalada, un retroceso significativo en comparación con años anteriores, cuando encabezaba la lista nacional.
El impacto de esta paralización no solo afecta a los objetivos climáticos de España, sino también a la economía regional. La energía eólica bloqueada representa una pérdida de oportunidad económica y ambiental, ya que la falta de aprovechamiento obliga al uso continuado de combustibles fósiles, con emisiones anuales de 2,5 millones de toneladas de CO2.
El peso de la «seguridad jurídica» en las inversiones renovables
Uno de los principales obstáculos para el desarrollo de estos proyectos es la falta de seguridad jurídica, una condición indispensable para atraer y mantener inversiones. “Tenemos empresas interesadas en invertir en Galicia, pero necesitan garantías legales para avanzar”, explicó Uría durante el foro empresarial Desarrollo renovable en Galicia: La seguridad jurídica de las inversiones, organizado por elEconomista.es.
La Xunta trabaja en soluciones para reactivar las inversiones, incluyendo un proceso de retramitación de los proyectos bloqueados bajo el principio de «interés público superior» de las energías renovables. Sin embargo, el proceso está condicionado por decisiones judiciales que escapan al ámbito regional y dependen del marco nacional y europeo.
El camino hacia el desbloqueo y el futuro del sector
A pesar de los desafíos, Galicia ha logrado que el 44,7% de su consumo final de energía provenga de fuentes renovables, un dato que supera la media nacional. Sin embargo, la electrificación creciente de la sociedad exige más avances en este ámbito.
“Estamos presionando para desbloquear la situación y seguimos trabajando para sacar adelante los proyectos en beneficio de la economía y el medio ambiente gallegos”, afirmó Uría. La Xunta confía en que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictamine a favor de los intereses regionales, aunque advierte que, de no ser así, las consecuencias afectarían al conjunto del país debido al marco normativo nacional.
Urgencia en la acción
El desbloqueo de los 2.600 MW bloqueados es clave para que Galicia recupere su competitividad en el sector renovable y cumpla con los objetivos nacionales y europeos de descarbonización. Este reto no solo implica resolver cuestiones legales, sino también generar confianza en el sector privado para que continúe apostando por el desarrollo de infraestructuras renovables en la región.