Un proyecto híbrido pionero en Portugal
Iberdrola ha obtenido la licencia de producción de la Dirección General de Energía y Geología de Portugal (DGEG) para iniciar la construcción del parque eólico más grande del país. Con una inversión cercana a los 350 millones de euros, este proyecto combinará energía eólica y energía hidroeléctrica, marcando un hito en la integración de tecnologías energéticas renovables en el sistema eléctrico portugués.
Ubicado en los distritos de Vila Real y Braga, el proyecto forma parte del Sistema de la Central Eléctrica de Tâmega (SET) y aprovechará infraestructuras existentes para maximizar la eficiencia de recursos.
Potencia energética y beneficios económicos
El parque contará con una capacidad instalada de 274 MW y producirá 601 GWh anuales, suficiente para abastecer a 128.000 hogares. Además, la colaboración con el fondo soberano noruego, gestionado por Norges Bank Investment Management, subraya la confianza internacional en este tipo de proyectos estratégicos.
En cuanto al impacto económico, se crearán hasta 700 empleos directos durante la fase de construcción, fomentando la participación de empresas locales como CJR, Conduril-Socorpena, Painhas y Proef. Estas compañías desempeñarán un papel crucial en la construcción de subestaciones y líneas de transporte previstas para inicios de 2025.
Tecnología avanzada para un suministro estable
El parque estará equipado con 38 aerogeneradores Vestas Enventus V172, con una capacidad unitaria de 7,2 MW, que optimizarán la producción y garantizarán un suministro energético estable. Esta alternancia entre tecnologías eólicas e hidroeléctricas mitigará la dependencia de factores climáticos, mejorando la estabilidad y la eficiencia del sistema.
Sistema de la Central Eléctrica de Tâmega: clave para la transición energética
Este proyecto se integra dentro del Complejo del Támega, una de las mayores infraestructuras hidroeléctricas de Europa, con una inversión acumulada de 1.500 millones de euros. Con una capacidad total instalada de 1.158 MW, el complejo contribuye significativamente al abastecimiento energético de Portugal y permite reducir la dependencia de combustibles fósiles.
Un paso adelante en la independencia energética
La integración de tecnologías renovables no solo refuerza la capacidad energética de Portugal, sino que también contribuye a su independencia energética al evitar la importación de 160.000 toneladas de petróleo al año. Además, este proyecto se alinea con los objetivos del Plan Nacional de Energía y Clima, posicionando a Iberdrola como un socio estratégico en el desarrollo sostenible del país.