Los consumidores son la pieza clave para lograr el 100% de energía verde

La industria también pone de manifiesto la necesidad de un marco fiscal estable para la consecución de los objetivos frente al cambio climático

La Unión Europea ha establecido objetivos ambiciosos para hacer frente al cambio climático y fomentar un medio ambiente más limpio, con el fin de convertirse en un continente neutro desde el punto de vista climático en 2050. En este sentido, “el consumidor debe entender que tiene un papel clave en esta transición y debe comenzar a modificar sus hábitos para gestionar la energía siempre que haya más renovables disponibles, o invertir directamente en tecnologías verdes”, así lo ha afirmado Antonio Colino, presidente de la Asociación Europea de Distribuidores y Proveedores de Servicios Energéticos y director general de Aldro Energía.

Unas declaraciones que están enmarcadas en el evento “Green Taxation Event” sobre fiscalidad verde organizado por el Departamento de Fiscalidad y Unión Aduanera de la Comisión Europea. Junto a Colino han participado Zakia Khattabi, ministra belga de Clima, Medio Ambiente, Desarrollo Sostenible y Pacto Verde, Paul Tang, eurodiputado y presidente de la Subcomisión de Asuntos Fiscales del Parlamento Europeo, Laurence Boone, economista jefe de la OCDE, Daniele Franco, ministro de Economía y Finanzas de Italia (país que preside este año el G20), Gerassimos Thomas, director general de Fiscalidad y Unión Aduanera de la Comisión Europea, y Céline Charveriat, director ejecutivo del Instituto de Política Medioambiental Europea.

“Durante estos primeros pasos de la transición energética podemos observar que se han puesto en marcha muchas iniciativas relacionadas con la oferta: nuevas plantas de producción de renovables, infraestructura de hidrógeno o biogás… pero todavía muy poco del lado de la demanda. Modificar solo el lado de la oferta puede llevarnos a los primeros objetivos, pero para lograr el 100% de energía verde es clave incluir en la ecuación al consumidor” señaló Colino.

La fiscalidad ambiental, esencial para lograr los objetivos

La fiscalidad medioambiental puede desempeñar un papel positivo y activo en la consecución de estos objetivos, fomentando el cambio hacia una energía más limpia, una industria más sostenible y unos hábitos más ecológicos. La fiscalidad ecológica también puede contribuir a una recuperación ecológica de la pandemia COVID-19 y a un crecimiento sostenible a largo plazo.

Para Antonio Colino, “la fiscalidad es un elemento clave para implicar a los diferentes tipos de consumidores. Desde el segmento de las PYMES o de la industria, la fiscalidad puede convertir los casos de negocio en un resultado mucho más favorable y desde el consumidor doméstico tiene una espiritualidad añadida que puede fomentar el compromiso. Una exención fiscal de 100 euros tiene a veces un impacto mayor que una subvención directa de 100 euros”.

El marco fiscal debe abarcar tres pilares fundamentales, tal y como considera Colino. El primero de ellos es la estabilidad y visión a largo plazo. “Los objetivos a corto plazo no deben crear una burbuja en la inversión verde que a largo plazo no sea sostenible desde el punto de vista de los ingresos fiscales. Un marco fiscal estable es imprescindible”, apunta Colino.

También es importante contar con transparencia un mensaje claro al consumidor. “Esto incluye quién es el recaudador de impuestos y evitar los diferentes impuestos y gravámenes indirectos. Los consumidores deben tener un mensaje claro y conocer el objetivo a conseguir, la descarbonización”, puntualiza el presidente.

Por último, es imprescindible contar con armonización y un verdadero liderazgo europeo. “Debemos evitar que exista una gran diferencia entre los estados miembros e incluso entre municipios. Además, tenemos que fomentar la igualdad de condiciones entre las fuentes de energía, así como la armonización sectorial”, concluye Colino.

- Advertisment -
- Advertisment -
- Advertisment -
- Advertisment -

últimas noticias