BP ha anunciado su decisión de vender su cartera de energía eólica terrestre en los Estados Unidos, una medida alineada con su estrategia de centrarse en el crecimiento de su rama fotovoltaica. La empresa británica de energía indicó que esta desinversión responde a la necesidad de simplificar su portafolio y maximizar el valor para sus accionistas.
BP detalló en un comunicado enviado a EFE que iniciará el proceso de venta de sus activos eólicos, agrupados bajo BP Wind Energy, que incluye participaciones en una decena de parques eólicos operativos repartidos en siete estados de EE.UU. El valor estimado de estos activos supera los 2.000 millones de dólares (aproximadamente 1.798 millones de euros).
Proyectos eólicos operativos y su valor
Los proyectos de energía eólica terrestre de BP en Estados Unidos tienen una capacidad combinada de generar 1,7 gigavatios (GW). Estas instalaciones ya están en funcionamiento, suministrando energía a la red mediante sistemas de control remoto desde la sede en Houston, Texas.
“Esta desinversión planificada es parte de nuestra estrategia para simplificar nuestra cartera y centrarnos en las oportunidades que generen más valor», declaró William Lin, director de la unidad de gas y energía baja en carbono de BP. Lin también señaló que la empresa considera que estos activos tendrán mayor valor en manos de otro propietario especializado en este tipo de energías.
Estrategia de transición energética hacia la fotovoltaica
Aunque BP se retira del sector de la energía eólica terrestre en EE.UU., sigue comprometida con el avance en energías renovables. La compañía ha decidido priorizar la energía solar fotovoltaica como parte central de su estrategia de transición hacia una compañía de «energía integrada».
El año pasado, BP anunció la adquisición total de Lightsource BP, su filial dedicada a proyectos solares fotovoltaicos. Se espera que, antes de finalizar 2024, BP cierre nuevos acuerdos para incrementar su capacidad de energía renovable a través de la expansión de esta sociedad.
Con esta decisión, BP refuerza su enfoque en la energía fotovoltaica, clave en su objetivo de reducir su huella de carbono y liderar la transición hacia un modelo energético más sostenible.
